La verdad es que nunca es el mejor momento para cambiar de empleo. Otra verdad es que, por lo general, no estás preparado cuando no te queda otra que cambiar de empleo.

Algunos dicen que una persona comienza a morir desde el mismo día en el que nace. Las relaciones laborales tienen una naturaleza análoga.

Al principio de tu estancia en la empresa llegas muy motivado, con ganas de demostrar tu valía. Esos primeros meses te dejas la piel, aprendes, propones, perfeccionas… Esos meses por lo general son de dar por encima de lo esperado por la empresa.

Pero, pasado un tiempo, cuando ya sabes cuál es tu lugar en la empresa, cuál es el nivel de desempeño esperado y cómo se te valora el esfuerzo, es ese momento en el que todo, frecuentemente, empieza a decaer.

Parece una visión fatalista, pero es un tipo de relación asíncrona, en la que la empresa tiene el mérito y es responsable de todo lo que la rodea, frente a un trabajador con menos músculo y capacidad de influencia.

Encontrar empleo en 2022 – 2023

Es verdad que esto ha ido cambiando. Hoy en día es tan difícil contratar Talento motivado que las empresas se esfuerzan en ofrecer las mejores condiciones posibles a los trabajadores.

La sombra de la Gran Dimisión afecta a todos los sectores (No sólo a las profesiones tecnológicas…), especialmente a sectores tradicionalmente de mano de obra intensiva y baja remuneración.

Por eso, todo trabajador debería prepararse, desde el día uno en su nueva empresa, para un posible cambio de empleo.

Tienes que permanecer estratégicamente visible en LinkedIn. Es un escaparate inmejorable para propiciar ese cambio de empleo que puedas necesitar más adelante.

Claro que, si eres un usuario pasivo en la red, y, de repente, actualizas tu perfil, rellenas todas las secciones y empiezas a publicar, compartir, recomendar y comentar…, hasta el jefe más miope sabrá interpretar que estás buscando trabajo.

Por eso, deberías ser ese usuario activo en LinkedIn siempre. Nunca, repito nunca, en caso de buscar empleo de forma clandestina, nunca utilices la opción “open to work” en LinkedIn, te ahorrarás muchos problemas.

La extraña relación de las empresas con las redes sociales de sus empleados

Es verdad que hay empresas que recelan de empleados activos en redes sociales, pero mientras compartas contenidos de la empresa y del sector, novedades técnicas o normativas en tu área de trabajo, y no se te vaya la pinza recomendando publicaciones de la competencia, rara vez te llamarán la atención.

De la empresa siempre depende que el trabajador la considere, o no, como el lugar ideal en el que seguir desarrollando su actividad profesional.

Cuando un trabajador deja de estar a gusto, de sentirse reconocido, motivado, o bien retribuido, se plantea levantar el pie del acelerador. Y siempre es responsabilidad de la empresa.

La Renuncia Silenciosa se apodera de él, y, entonces, la búsqueda de empleo es una prioridad. No esperes a este momento, adelántate. Si no has sido proactivo y la necesidad lo apremia, ya se sabe, las prisas son siempre malas consejeras.

Si no te has dado cuenta, el mejor momento para buscar empleo en LinkedIn es todo el tiempo.

En la mayoría de los procesos selectivos que he llevado a cabo en los últimos años he contactado directamente con los posibles candidatos. Y es que LinkedIn permite encontrar el Talento que se necesita, pero claro, siempre que esté visible.

Sólo te pueden encontrar si tú eres capaz de mostrar en la red tu valía y la actualización de tus conocimientos a través de un perfil cuidado.

De ti depende que cuando llegue el fatal día estés preparado para lo que venga.